Esta historia sería oro puro para la ironía de Larra o, por supuesto, el esperpento de Valle-Inclán. La obra abordaría las cosas que suceden en el interior de un gran edificio, un palacio sombrío y polvoriento, lleno a rebosar de tipos agrios y anticuados, de enchufados y parientes. Desgraciadamente, también daría para mucho en manos de Kafka, que podría componer algo siniestro, aberrante, angustioso… El Tribunal de Cuentas, con una capacidad de punición sin igual entre los organismos europeos que pueden vagamente comparársele, fue activado en su día por el círculo próximo a Rajoy, como han confirmado algunas informaciones, para … Continuar llegint