La creencia general, por ahora hegemónica, sobre las próximas elecciones del 26 de junio es, resumiendo, que no van a darse variaciones significativas en los resultados. Es decir, que va a dibujarse un puzle muy parecido al que produjeron las urnas en diciembre. De hecho, determinados elementos refuerzan tal presunción, como, por ejemplo, el hecho de que las candidaturas sean las mismas o casi las mismas. No es extraño, pues, que sumidos en una dinámica inercial, los partidos se concentren más en no cometer errores que en tratar de llevar a cabo una precampaña y una campaña novedosas. Se trataría, … Continuar llegint