Salvador Illa no lo tiene tan fácil como algunos quieren creer. Los sondeos han reflejado, unos más, otros menos, que la irrupción de Illa en la carrera electoral era muy bien recibida. Pero hasta las elecciones queda un buen trecho, que se le va a hacer largo. Le hubiera ido mucho mejor si el Govern no hubiera intentado aplazar la cita con las urnas. Que el PSC fuera el único partido en rechazar el 30 de mayo -no quería arriesgarse a que el efecto Illa se diluyera- y utilizara a alguna de sus terminales -Izquierda en Positivo- para recurrir ante … Continuar leyendo